¿Dormías tranquilo pensando que Freddy Krueger no podía asesinarte en tus sueños? Pues tal vez quieras pensarlo dos veces, pues aquí en Breakdown te contaremos la verdadera historia que inspiró al famoso villano de las películas Pesadilla en la calle Elm de Wes Craven.
Seguro recuerdas esta icónica película, que hizo su aparición por primera vez en el año de 1984, en donde un grupo de adolescentes sufre de inquietantes pesadillas en las que, un ser deforme que porta garras de acero, los persigue.
Los malévolos actos que ejecuta Freddy Krueger, sugieren que lo que ocurre mientras sueñan repercute en la vida real, por lo que los chicos, intentaban evitar dormir.
Pero no, no te preocupes, Freddy Krueger no existe ni existió (inserta tu respiro de alivio), pero ¡sí estuvo basada en hechos reales!
Existe una vieja historia sobre una familia que había escapado de la violencia en Camboya. El hijo de la familia sufría de estrés postraumático que terminó desencadenando pesadillas horribles, que finalmente lograron matarlo. De ahí nació la idea de Freddy Krueger, personificando la violencia que el niño tanto temía.
“Leí un artículo en el L.A. Times sobre una familia que había escapado de Killing Fieldsen Camboya y había logrado llegar a los Estados Unidos. Las cosas estaban bien, pero, de repente, el hijo pequeño estaba teniendo pesadillas muy inquietantes. Les dijo a sus padres que temía que si dormía, la cosa que lo perseguía lo atrapara, por lo que trató de permanecer despierto durante días, sin éxito. Cuando finalmente se durmió, sus padres pensaron que esta crisis había terminado. Más tarde, escucharon gritos en medio de la noche. Para cuando llegaron a él, estaba muerto. Murió en medio de una pesadilla. Aquí estaba un joven que tenía una visión de un horror que todos los mayores estaban negando. Eso se convirtió en la línea central de Nightmare on Elm Street", dijo Carven.
Jamás se supo a ciencia cierta lo que el niño veía en sus pesadillas, pero Craven, notó que realmente era posible morir por miedo o shock.
Ésta fue la inspiración perfecta que Craven le regalaría al cine de terror. El escenario perfecto para un asesino, que, sabía muy bien que sus víctimas tenían que dormir y no podrían escapar de él.
Si es terrorífico lo real que suelen ser los sueños... ¿Puedes imaginar este tipo de pesadillas tan recurrentes?